miércoles, 20 de noviembre de 2013

INFANCIA DE EXILIO

PARTIDA


Hoxe partín de min.
Fun bordeando a maxia do verán
e o resol dun xardín cheo de infancia.

Despoxado, trúxome o aire saudade,
e tenra cadencia do norte
a carón dos méus mesmos pasos.

A cinta azul da miña trenza era axitado mar,
cando saltei as pedras do regato.
Sombra de peregrino campanario,
rezo silandeiro, ao cruzar o atrio de San Xulián
a Santa Compaña perdíase.

Os ollos, aínda antes que os pasos,
dende Padrón despederon Cesures,
Valga, Caldas de Rei, a Gloria,

Apuroume a fame e o medo,
e na sala do Axuntamento
quedóume o corazón de nena
pechado na cárcere dun Pasaporte.

Grillones levaban meus tornecelos
ao subir a escalinata do barco.
A noite non tiña voces.
O océano, un mantelo de sal enriba da ferida.



PARTIDA

Hoy partí de mí.
Fui bordeando la magia del verano
y el resol de un jardín lleno de infancia.
Despojado, me trajo el aire recuerdos,
y tierna cadencia del norte
en la cercanía de mis propios pasos.

La cinta azul de mi trenza era agitado mar,
cuando salté las piedras del regato.
Sombra de peregrino campanario,
rezo silente, al cruzar el atrio de San Julián
la Santa Compaña se perdía.

Los ojos, antes que los pasos,
desde Padrón despidieron Cesures,
Valga, Caldas de Rei, la Gloria.

Me apuraron el hambre y el miedo
y en la sala de la Intendencia,
quedó mi corazón de niña
encerrado en la cárcel de un Pasaporte.

Grilletes llevaban mis tobillos
al subir la escalinata del barco.
La noche no tenía voces.
El océano, un manto de sal sobre la herida.

Imagen:  Internet . Fotos de Manuel Ferrol
Esa despedida de los emigrantes queda patente en las fotografías de Manuel Ferrol (Cabo Vilán, 1923- A Coruña, 2003), quien formó parte de ese grupo de fotógrafos españoles de posguerra que sin contar casi con formación, decidieron fotografiar la realidad de su entorno más cercano.
En 1950 Ferrol decide montar un estudio en Betanzos y sus primeras fotografías remuneradas serán retratos de niños a domicilio. Desde esta época empieza a colaborar también en Gaceta Ilustrada”, “Arriba”, “La Hora” y “Vida Gallega”. Establecería después su estudio en A Coruña, lugar que pasaría a ser su residencia fija.
Ferrol es el autor de la transcendental la foto que se considera imagen de la emigración, instantánea tomada en a un hombre y un niño abrazados y llorando en la Estación Marítima del puerto de A Coruña. Esta serie de fotografías fueron encargadas por el sacerdote de la Comisión Católica de Emigración, para documentar el embarque de emigrantes gallegos en el trasatlántico Juan de Garay, que los trasladaba a América.,



M.R.-C.
Versos de doble faz en el País de la Poesía
Derechos Reservados (2010)

No hay comentarios:

Publicar un comentario