lunes, 30 de septiembre de 2019

POETAS CONTEMPORÁNEOS

LUIS ALBERTO DE CUENCA 


LA SIRENITA 

Para Alicia, que dejó el mar y se vino a vivir a mi bañera. 


Con tus cinco guapísimas hermanas 
y tu abuela y tu padre eras feliz en el fondo del mar, 
donde la vida hierve bajo el conjuro silencioso 
que urde la vara mágica del agua. 

Pero ser feliz cansa, y aun abruma, 
como cansa y abruma la familia, 
de manera que un día decidiste romper con tu pasado 
y buscar novio entre los hombres de la superficie. 
Por si eso fuera poco, alguien te dijo 
que si te enamorabas de un humano serías inmortal,
 lo que sonaba bien, aunque no acabases de creértelo. 
El caso es que una bruja te dio piernas 
(y alguna cosa más que ahora me callo), 
y, satisfecha con tu nuevo cuerpo, pusiste rumbo a tierra. 

Era en agosto, y a nadie le extrañó verte en la playa, 
desnuda y sonriente, con tus piernas recién inauguradas, 
vacilantes 38 39 aún, pero tan largas y perfectas 
como las de la diosa del amor en el lienzo de Sandro Botticelli. 
Yo estaba por allí, matando el tiempo,
 tomando el sol quizá, disimulando el horror 
que la gente me inspiraba detrás de una expresión dulce y afable, 
cuando tú aniquilaste mi tristeza con solo aparecer ante mi vista, 
y supe que la gloria del deseo se instalaba en mi alma para siempre. 
Y a ti te pasó igual (lo que es más raro, teniendo en cuenta 
que yo no era príncipe y me sobraban unos cuantos kilos), 
y empezó nuestra historia de amor loco, que hoy continúa viva, 
tantos años después, y que mañana estará viva y siempre vivirá, 
porque está hecha de la misma materia incombustible 
con que se hacen los mitos y los sueños.




EL DESAYUNO




Me gustas cuando dices tonterías,
cuando metes la pata, cuando mientes,
cuando te vas de compras con tu madre
y llego tarde al cine por tu culpa.
Me gustas más cuando es mi cumpleaños
y me cubres de besos y de tartas,
o cuando eres feliz y se te nota,
o cuando eres genial con una frase
que lo resume todo, o cuando ríes
(tu risa es una ducha en el infierno),
o cuando me perdonas un olvido.
Pero aún me gustas más, tanto que casi
no puedo resistir lo que me gustas,
cuando, llena de vida, te despiertas
y lo primero que haces es decirme:
«Tengo un hambre feroz esta mañana.
Voy a empezar contigo el desayuno».




Luis Alberto de Cuenca (Madrid 1950)
Filólogo, poeta, traductor, essayista, columnista, critico, y editor literario.. 
Licenciado y doctor en Filología Clásica  por la Universidad Autónoma de Madrid.
Académico de número de la Real Academia de la Historia,​ académico de la Academia de Buenas Letras de Granada,​ vocal del Real Patronato del Museo del Prado.​ y miembro del jurado del Premio Princesa de Asturias de las Letras.​

POETAS CUBANAS



MARIENE LUFRIÚ RODRÍGUEZ



Necesidad



Estoy sola, perpetua y enclaustrada,

tratando de esconder las ansias locas

de volver a la auténtica morada

donde fui la pasión de tantas bocas.



Marcho impura, fugaz, desesperada,

abriéndome camino entre las rocas.

No quiero una lujuria desmembrada.

No quiero que estas ganas sean pocas.



Por eso vuelvo a las mordidas tiernas,

a donde guardo mi genuino nombre,

donde estas carnes se verán eternas



sin que nadie se queje ni se asombre.

Es que tengo calor entre las piernas

y voy corriendo a conseguir un hombre.


POETAS CUBANAS



LILIANA SARIOL IZQUIERDO




[Vengo como si quererte…]

Vengo como si quererte fuera tirar piedras al lomo azul de mi perro; vengo dándote los abismos y hasta las fiebres que padecimos juntos; vengo dándole dolor al sístole, agarrando siluetas que se tornan tornasol y enseñas tus dientes que si libres fueran sangraría todo en mí, y lo peor es que yo sé que me quieres tanto que no te alcanza el valor para matarme a poquitos. Aun así me atrevo a decirte que al final del día te caigo muerta; quiero que te desvanezcas tranquilo, sin verme, palpando el eco ensimismado de mi voz. Pero si en el barullo de mis órdenes te quedas atrás, lo siento, amor. Por esa puerta no cabe tu alma.

POETAS CUBANAS



AMELIA DEL CASTILLO





Casi yo



Estoy casi de vuelta.

Sin bagaje. Náufrago de la noche.

Casi abierta.

A mi lado se acuesta – como un perro –

la sombra del desvelo de mí misma.

¡Cómo me llama el tiempo que no ha sido!

A él voy como al regreso,

como a la mar el río.

Y se rompen estrellas sobre la noche blanca

como se rompe en llanto una sonrisa.

.

Estoy casi de vuelta

aunque no me haya ido.

. . .

De pie

.

Si estoy de pie

es porque me levanto,

porque me empino

más allá de mi asombro y mi estatura,

porque no aliento cicatrices

ni fantasmas, ni pasado.

.

Si estoy de pie

es porque sigo andando,

porque me llama el viento

y me llaman la luz y los relámpagos.

.

Porque cantan los pájaros

(todavía)

y los niños sueñan

(todavía),

porque no preciso razones

ni respuestas.

.
Porque tomo mi cruz sin intercambios.

. . .

Mi corazón

.

tiene latido de lobezno,

el tuyo, sangre de paloma.

Si me habitas

tu sangre dulce me sosiega,

si me faltas

montes, selvas y riscos se me trenzan

y se trenzan el miedo y el rugido

y me crezco de pronto por la fiera.

.

Tu corazón,

tu amanecido corazón de ave

– Ícaro deslumbrado –

en qué azul,

¿en qué vuelo sin mí lastimará sus alas?

Y el mío,

mi corazón acerbo sin tu alivio,

¿en qué rincón de sombras, en qué huída

desgarrará mi entraña y tu paloma?

. . .

Invierno

.

Desarropado tu hálito vital

¿quién te acoge, quién acaricia

tu desnudez de piedra?

.

Levántate.

Hay que buscarle abrigo

a la intemperie,

un hueco al desamparo, un plato

al hambre.

Hay que buscarle sitio a la resaca,

a los huesos, los fósiles,

las algas.

.

Levántate.

Hay que inventar un puerto,

un pedazo de azul

                                                             para el naufragio.



Amelia del Castillo (Matanzas, Cuba) es poeta, narradora, ensayista y compositora.
vivió siempre en La Habana, estudiando en los colegios Las Ursulinas, Sepúlveda, Instituto de Segunda Enseñanza de La Habana, Havana Business University y la Universidad de La Habana. 
En Miami vuelve a las aulas universitarias graduándose por St. Thomas University.
Es Miembro fundador del PEN de Escritores Cubanos en el Exilio, filial del International PEN, (Londres, Inglaterra), ocupando en distintas ocasiones las posiciones de Secretaria y Tesorera. 
Fue Miembro fundador, Presidenta en diversas ocasiones, y "Chairperson" de la Junta de Directores del Grupo Artístico Literario Abril (GALA), organización cultural de amplia difusión y proyección a través de sus Premios Internacionales de Poesía y Cuento, desde su fundación en 1978 hasta su cese en 1990. 
Es miembro de diversas instituciones culturales y profesionales donde ha desempeñado cargos de Vocal de Cultura, Asesora Literaria, Coordinadora, etc.
Ha ofrecido lecturas y conferencias en Bibliotecas y Universidades norteamericanas y extranjeras, participando activamente en Congresos nacionales e internacionales celebrados en Argentina, Canadá, Colombia, España, México, Puerto Rico y República Dominicana, así como en las ciudades de San Diego (CA), New York (NY), New Orleans (LA), Miami (FL), Washington (DC), Greenville (SC), Wilmington (NC), New Brunswick (NJ), Boulder (CO) y Emporia, Wichita y Kansas (KA), inaugurando en la última, por invitación de su Gobernador, los actos de la instauración de la Semana de la Hispanidad en el Estado de Kansas. Los trabajos leídos en estos congresos (algunos traducidos y publicados en inglés, francés e italiano) se recogen en Palabras al vuelo (Ediciones Baquiana, 2012).












POETAS CUBANAS



CARILDA OLIVER LABRA




HOMBRES QUE ME SERVISTEIS DE VERANO

Ése que no dejó de ser mi amante
y al que le debo siempre sepultura,
uno a quien nunca quise lo bastante;
aquél, obra de sueño, conjetura...


Alguien que jugó a nada y tuvo suerte,
otro que no ha venido de la guerra,
éste donde converso con mi muerte
porque me lo disputa hasta la tierra.

¡Salid de la memoria evocadora
con vuestro amor, pues tengo frío ahora!
Sabed todos que os llevo de la mano.

Vuestras sombras estallan como un mito
de vez en cuando aquí. Sois lo bendito,
hombres que me servisteis de verano.

***

AMOR, COMO ES QUE VIENES...

Amor, ¿cómo es que vienes
a darle al pensamiento tu estocada
si estoy entre las sienes
-débil mujer a golpes decorada-
y apenas tengo trato con la aurora
por no mirar la luz que eres ahora'?

Amor, ¿cómo es que usas
el mismo corazón en que naufrago
y arrimas tus confusas
palabras al silencio este tan vago
y en brote que es de gloria me enajenas
mientras ardiendo estoy entre las penas'?

Amor, ¿cómo es que tocas
eI mundo donde salgo desmentida,
y vuelves y provocas
de nuevo los dolores de tu huída
si a tiempo de morirme tanto y tanto
te yergues sin cadáver en mi canto?



Carilda Oliver Labra (Matanzas, 1924), una de las más importantes poetas cubanas contemporáneas, reconocida internacionalmente.
Doctora en Derecho Civil, además de ejercer su profesión como abogada, trabajó también en la biblioteca pública Gener y del Monte, de Matanzas, y fue profesora de inglés, de dibujo, pintura y escultura.
Su poética es de fervoroso contenido femenino y social.

viernes, 27 de septiembre de 2019

AVANCE




EXILIO EN SEPIA
de Marita Rodríguez-Cazaux


POEMAS (2019)

PUBLICADO POR EDITORIAL DUNKEN


PRÓLOGO DE HILARIO FRAGA POTEL

LIMINAR Y CONTRATA DE OSVALDO ROSSI




viernes, 13 de septiembre de 2019


CLÍNICA DE NARRATIVA Y POESÍA - Teoría, Práctica y Publicación
A todos los participantes se les publicará una obra para un libro colectivo que se presentará en la segunda jornada.


Sábado 19 de octubre en Editorial Dunken
TÓPICOS DE LA CLÍNICA:

CUENTO - RELATO
  • Atmósfera
  • Personajes
  • Primera persona – Narrador omnisciente.
  • Tercera persona –  Cercanía y lejanía al emplearla.
  • Coherencia en el texto
  • Remate cerrado y abierto
  • Puntuación acertada
  • Tiempos de verbos
POESÍA
  • Metáfora
  • Mensaje
  • Recursos varios
  • Prosa poética

Coordinada por: Marita Rodríguez-Cazaux

La clínica consta de dos jornadas:
- En la primera, se abordarán variados tópicos del género. Al final de la reunión se convocará a los participantes a enviar una obra de su autoría aplicando las nociones adquiridas para ser publicadas en un libro colectivo.
- En la segunda jornada se presentará y comentará el libro con todas las obras recibidas.

Actividad arancelada. Cupos limitados. 
Para más información o inscribirte ingresa aquí

lunes, 9 de septiembre de 2019

APORTES CULTURALES


Entrada nueva en Fernando Veglia

“Trueque”, de Fernando Veglia — Biblioteca de relatos cortos

por fernandoveglia
Uniendo el norte con el sur de Egipto, Menfis desafiaba al tiempo protegida por su muralla blanca y el dios Ptah. Hogar del Faraón, albergaba el palacio, templos, mercados bulliciosos y barrios laberínticos. Fuera de los muros, estaban las grandes necrópolis y las colosales pirámides. Sus calles bullían de actividades y oportunidades, de voces ofreciendo […]

viernes, 6 de septiembre de 2019

RESEÑAS - OPINIÓN - CRÍTICAS LITERARIAS





Deconstrucción de los rostros y otros poemas, 
de Luis Raúl Calvo 

                                                                                                        Por Adriana Gaspar


"Ante todo quiero agradecer a Luis, que haya pensado en mí para compartir con Luis Benítez la presentación de su libro, como así, también la posibilidad de trasmitirles a todos ustedes mi percepción acerca del mismo. 

Desde mi profesión de investigadora y crítica de arte podría hacer un análisis conceptual de las imágenes materializadas en las palabras que abraza este libro, pero no es esa mi intensión, la idea es situarme en el lugar de lectora; quién se encuentra con un libro doblemente valioso: por un lado, la belleza que emerge de su poesía y por otro: la belleza estética del libro como objeto artístico. 

El enunciado del libro genera en mí, un carácter sugerente, enigmático, si bien en el campo de lo literario la deconstrucción se relaciona con el análisis de la estructura que compone el discurso, aquí, a mi criterio, intenta poner al descubierto la identidad de los personajes protagónicos que conforman la primera parte, los procesos dinámicos por los que atravesaron cada uno de ellos, no solo en su vida personal, sino también en esas relaciones vinculares de amor y desamor, de coincidencias y disidencias que mantuvieron los protagonistas que Luis eligió, esos, que en la textura de cada página dejaron la frescura de sus aromas. 

Título e imagen nos reúnen con lo afectivo, aunque también con lo inquietante, hasta rosar casi, con lo siniestro. 

Tres pares de zapatos, obra de Vincent Van Gogh, es la pintura elegida por Luis para ilustrar la tapa de su libro. Obra muy poco conocida, por quienes no son conocedores del mundo del arte, si bien el artista realizó a lo largo de su corta vida varias pinturas ubicando como actores principales a los botines o zapatos, siempre fue un par, los que ocupaban la escena de sus lienzos. 

Aquí, son seis botas expuestas a nuestras miradas, no sabemos si son 3 pares o simplemente 6 zapatos diferentes, los que alguna vez sostuvieron esos cuerpos posteriormente ausentes. Seis botines que velan y develan. El no saber a quienes pertenecieron me inquieta, me genera angustia, sus rajaduras me conmocionan, ese polvo gris que cubre su andar en la vida, me remite a la libertad, a esa búsqueda del artista y del poeta. 

Cuerpos invisibilizados y botines de procedencia desconocida, éstos últimos con el paso de los años cobraron vida propia, quizás, nunca sabremos si existieron, o tan solo fueron materializados pictóricamente por Van Gogh en pos de su propia historia y la que lo rodeaba. Muchas teorías cobraron fuerzas en torno a los zapatos pintados por Van Gogh, por ejemplo, el filósofo francés Derrida creyó contemplar que eran diferentes entre sí y pertenecerían a pares distintos, esto nos puede provocar aún más escozor. 

De la imagen, emerge un clima poético, sumergido en una profunda carga afectiva. Clima que Luis, le otorga a sus poemas, esto me transborda a pensar el motivo de la elección de esta obra para protagonizar la tapa de su libro, ambos transitan el mismo sendero, bucear hasta llegar a territorios insoslayables. El poeta, por un lado, intenta abrir un abanico en torno a la vida del pintor. Por otro lado, en la segunda parte, conectarnos con su vida, con sus recuerdos, con historias que se reescriben con el paso de los años, en la memoria colectiva de sus pares, y en la suya propia. 

Silla vacía, aquí el poeta al igual que el pintor le otorgan al objeto, una entidad autónoma. En un escenario habitado por esa fragilidad, casi esquelética, se encuentra ella, esperando el alivio de quien la rose con una caricia, o con el llanto congelado de cada frio despertar. 

En Dos hermanos, Luis le confiere al poema la quietud de imágenes que ponen de manifiesto un vínculo, quizás, contaminado por el devenir de la vida misma. Un pedido de ayuda, desbordado por obsesiones descontroladas, apasionadas, no siempre recíprocas, son las que se entremezclan en la furia, el amor, el cansancio y el vacío interno que los contiene. Un grito de auxilio, origina esa antigua leyenda y en ella, la fragilidad de dos cuerpos. Como dice el poeta: Ambos sin saberlo, atravesaron la inmortalidad de sus sueños 

En Deconstrucción de los rostros y otros poemas, Luis adopta y seguramente admira ese accionar visionario de Van Gogh (para su época), de concederle a los objetos (los botines y la silla) identidad absoluta en el campo del arte. Hecho que más tarde provocaría un cambio de paradigma en el siglo XX, primero con el Mingitorio de Marcel Duchamp y más tarde con las Cajas Brillo de Warhol. 

Sobre Christine, ocho poemas que el autor le ofrenda al amor, esa mujer con la que Van Gogh logró un espacio de paz, hasta me animaría a decir, de felicidad. El poeta nos confiere escenas que no dejan dudas de las huellas que la modelo dejó en la vida del pintor, una pasión redundada en el goce de dos cuerpos que se funden en el vacío de crudos territorios, en una habitación cubierta por las hendiduras que dejó la miseria de aquel tiempo que fue, del aroma inconfundible que recorren sus pieles. Sin duda Luis le concedió a sus poemas la belleza que el pintor le otorgó a aquella extraña y suave mujer. 

Gauguin y yo, un día el horror sacudió a dos artistas, la habitación, el desván y el jardín agreste, se vieron envueltos por el estallido desesperado de dos hombres agobiados por las vicisitudes de una amistad desfallecida. Una ofrenda inesperada, un derrame de sangre recorrió las escaleras de la antigua casa. Su paleta quedó allí adormecida, mientras tanto el artista yacía en la soledad inhóspita de un inhabitado loquero. El poeta no escapó a esta historia, por eso el horror lo transformó en belleza, y quizás en algún sitio, ese esperado reencuentro de dos viejos amigos, forme parte de una leyenda. 

Carta de Vincent Van Gogh a Antonín Artaud, aquí, Luis nos obsequia una carta imaginaria de quien sabía que su figura no quedaría en soledad en la historia de arte, una extensa lista de artistas de distintas disciplinas atravesarían por circunstancias similares, las que los convertirían en cuerpos frágiles, casi inconsistentes, pero algo los unía, la rebeldía, la trasgresión, la genialidad, el talento de aquellos que atravesaron la locura, la vida mugrienta de esos cuartos oscuros del hospicio. Pero Luis optó por uno, Antonin Artaud, él fue el elegido por el poeta. La lucidez, la enajenación y el martirio envolvieron sus almas, el pintor y el escritor, sellaron un pacto impensado, sus obras trascenderían los siglos. Quizás con el paso del tiempo Luis, escriba nuevas cartas, otros seguramente, tendrán su lugar en un nuevo libro del autor. Pero ésta que hoy nos presenta, nos deja el alivio de saber que Van Gogh y Artaud, ahora están aquí, participando de este encuentro. Por unas horas dejaron su orfandad, la oscuridad del sótano, que los cobija, la comida agria de sabor a encierro, para estar entre nosotros, quizás, compartiendo un vino, al lado nuestro, celebrando el nacimiento de estos nuevos versos y de esa carta que los unirá para siempre. 

Otros poemas, segunda parte, aquí el poeta nos invita a hacer un recorrido por nuestra historia, por su historia. 

Cuestiones filiales (dedicado a su madre) y Sala de espera, están íntimamente ligados a su infancia. En el primero, evoca otra vez al amor, pero en esta oportunidad es el amor de un niño, luego adulto, a sus padres, el recuerdo de su madre y esas faldas que lo cobijaron, que lo abrazaron en las frías noches del invierno de su niñez. Los paseos con ellos y su hermana. Luis, nos propone, un instante muy íntimo, en el que los aromas, los sonidos y la escuela no están ausentes, quedan latentes en estas paredes, entre nosotros. Son recuerdos muy fuertes, nos dejan sin aire por unos segundos, pero pronto nos levantamos y volvemos a respirar y allí les proponemos transitar juntos nuevamente por aquella calle de casas bajas, refugiarnos en ellas, en ese despertar de cada mañana. Por eso me permito cerrar estas líneas con el último verso de este poema, Siempre tu eterno sabor a madre. 

Sala de espera, lo sitúa en su entorno familiar, la figura de su padre siempre latente, seguramente sea el causante de esas conversaciones de las que el poeta habla. Conversaciones cubiertas de dolencias, incertidumbre, las que yacían en el antiguo consultorio de su padre, sus travesuras de niño. Pero también aquellos relatos cargados de misterio, como la inesperada desaparición de un cuadro, centrado en el blanco radiante de las aterciopeladas paredes de esa tibia sala de espera. 

Varios poemas de la segunda parte del libro, están atravesados por un hilo conductor, la búsqueda permanente de la identidad, de una sociedad que ha quedado desfallecida de valores, esos que Luis evoca en el recorrido de sus versos. 

Ella, texto dedicado a Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, un poema que cobra fuerza en estos tiempos. Tiempos en que la ausencia golpea puertas, busca respuestas a tanto silencio. 

La lucha, se transforma en esperanza, los relatos se reproducen y se suman nuevos reencuentros, las palabras de sus versos arman un gran rompecabezas, los que se traducen en imágenes, esas que tantos artistas corporizamos en un audaz y bello mural, en una pintura o simplemente en acciones públicas, las que dejan la huella de lo que fue, las pisadas transitan las plazas de nuestro barrio y en ella se genera el poema. 

Reencuentro, dedicado a Antonio Aliberti, un poema colmado de largas noches de poesía, de intercambio. ¿Cómo fue ese reencuentro? ¿Quizás fue una noche de neblina?, Esas, que pueblan los edificios, los antiguos bares, en el que cada transeúnte es casi un fantasma. Muchos años habían pasado, pero la amistad, el respeto y la poesía, se encargaron de unirlos, aunque nunca se separaron. El gran poeta sigue aquí, en cada viernes, su silla todavía permanece casi de pie, lo espera. En el concepto de Rolan Barthes, su foto sigue intacta, ella, cobró fuerza después de su muerte. Hoy está sobrevolando este espacio, su memoria permanece viva en la voz del poeta. 

Generación Abierta 30 años, Muchos han viajado a territorios desconocidos y en ellos algunos se han reencontrados. La fugacidad del tiempo no nos da tregua. No escuchamos sus voces, el silencio se agudiza en algunas veladas, pero ellos saben que están presentes, en su poesía, en una entrevista radial, en algún artículo de la revista, sus versos se desplazan en las telas de los artistas. No quedaron solos, están juntos y quizás los viernes, nos escuchen desde algún rincón del universo. 

Toda una historia de vida se refleja en cada página de este libro, escenas que recorren cada instante, cada recuerdo, la llegada de una carta en forma inesperada. El poeta no disocia su obra, de su vida. La que se encuentra cargada de afecto, ese que nos ofrece a quienes estamos hoy acá, como también a esas almas guardianas que ya no habitan este espacio, el de la belleza interna de cada palabra convertida en imagen, en pequeños y misteriosos silencios. Su riqueza poética convive con la cotidianeidad de su andar, con la fugacidad de la vida, con las etéreas voces de la memoria, con la reflexión crítica, con un relato inesperado de esas noches desveladas en las que la belleza se convierte en poesía". 

El presente análisis literario de Adriana Gaspar fue leído por su autora en la presentación del libro del poeta Luis Raúl Calvo, en el ciclo Antonio Aliberti, Bar Notable Montserrat (2019) 




«Deconstrucción de los rostros y otros poemas», de Luis Raúl Calvo 
(Ed. «Generación Abierta», Buenos Aires, 2019) 





Luis Raúl Calvo nació y vive en Buenos Aires, Argentina en 1955. 
Poeta y ensayista. Autor y compositor de música, cantautor. 
Licenciado en Psicología. 

Dirige la Revista “Generación Abierta” (Letras-Arte-Educación) desde su fundación en 1988, publicación “Declarada de Interés Cultural de la Ciudad de Buenos Aires”, en el año 2000, por la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Dirige desde 1992 el Café Literario “Antonio Aliberti”, en el Café Montserrat.Desde 2007 co-conduce y produce el programa radial “Generación Abierta en Radio”, los martes a las 17 hs por FM Cultura, 97.9 MHZ.Ha recibido diversas distinciones literarias.Parte de su obra ha sido traducida al inglés, francés, italiano, rumano y portugués.

Obra publicada en poesía: “Tiempo dolorosamente resignado”(Ediciones “Generación Abierta”, 1989); “La anunciación de la partera” (Ediciones Correo Latino, 1992); “Calles asiáticas” (Editorial Plus Ultra, 1996)); “Bajos fondos del alma” (Ediciones “Generación Abierta”, 2002); ”Belleza nómade” (Ediciones Generación Abierta, 2007); “Nimic pentru aici, nimic pentru dincolo”, Antología Poética, en lengua rumana, con traducción de Flavia Cosma (Editorial Gens Latina, Rumania, 2009); “Nada por aquí, nada por allá”, Antología Poética, en español (Ediciones Generación Abierta, 2009); “Profane Uncertainties” (“Profana Incertidumbre”), Antología Poética, en lengua inglesa, con traducción de Flavia Cosma (Editorial Cervena Barva Press, Estados Unidos, 2010).
En 2010 grabó su primer álbum musical, “¿Cuál es la verdad de lo vivido?”-Canciones urbanas- con temas de su autoría y la musicalización del poema “¿Será verdad que cuando toca el sueño?”, de Gustavo Adolfo Bécquer.

miércoles, 4 de septiembre de 2019

DÍA DEL EMIGRANTE





BEBER LOS AIRES



A miseria en torno deles/adiante o abismo”.
Rosalía de Castro


Marcha con un atadito de sueños
a beberse los aires.

Los buenos aires –dice–,
y por el dintel de la mirada
un mar de ensueños vivifica
raíces retorcidas.

Sobre el párpado habrá de levitar
brisa de estío –canta–
cuando pise la Tierra Prometida.

Después, 
inventará una historia –llora– 
en delgadito papel carta vía aérea,
bebiéndose el abismo. 


Marita Rodríguez-Cazaux
Exilio en sepia (Avance)
Editorial Dunken, 2019

La imagen no pertenece al poemario.
Imagen Internet