viernes, 15 de febrero de 2013

CUANDO DE ABRAZOS SE TRATA


                                                               
ORACIÓN SACRA


He de celebrar con postración y honores
las Santas Fiestas.
Navidad, Epifanía, Pascua de Resurrección,
Ascensión, Pentecostés, Trinidad,
Purísima Asunción de Gloria plena.
Pirim, Pesah, Sabu´ot, Pos ha-Saná, Yom Kippur,
Sukkot, Hanuká, en respetuoso rito.
Alta bienaventuranza del Mulud, Él sea loado,
sagrado Ramadán y Aid-el-Kebir.


He de cantar todos los himnos consagrados
y salmos a la misericordia
del Dios de todas las generaciones,
que por suprema bondad me ha concedido
en este valle de lágrimas y guerra,
en este cuerpo de lodo que me encierra,
despertar a tus divinos abrazos celestiales. 



 SI NO LO ESCRIBO



Si no lo escribo,
no tendrá alma de pájaro.
Quedará en un puño apretado su trino.

Por caminos sin regreso irá perdido
sin la brújula de la palabra escrita.

Desmemoriados los gestos, el abrazo,
las horas de ternura y el encuentro
en el puerto anónimo del beso.
La tierra seca del secreto.
Los sueños que partieron al exilio.

Si no lo escribo,
no estallarán petardos
sobre la mansedumbre de la siesta.

Será ausencia el destino,
rencor en ríos de abandonado lazo.
Viudez de pétalo y espina.

Poca cosa la vida.
Poca cosa.
Y este amor no será, si no lo escribo.




                                                          
TELEGRAMA


En el lugar exacto del recuerdo
busco sentir el peso del abrazo. 

En penumbra, tantean los ojos
mirando hacia adentro, cada minuto.

El roce de la camisa, la hilera de botones,
el arco del bolsillo en la chaqueta.
Congregación de latiros
la meseta cálida del pecho.
Rumor de palabras detenidas,
gestos propios, sonidos
que precipitan la sonrisa muda
en milimétrica inclinación del cuello.


                                                         Estallidos callados y secretos
                                                      en el mapa misterioso del cuerpo.
                                                    
                                                                      Telegramas en clave
                                                                      que, solamente, sabemos vos y yo.



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